
Bienvenidas y bienvenidos a mi particular gabinete de curiosidades.
Quiero ofrecerte mi trabajo como si de tesoros encontrados en océanos inexplorados se tratase. Pequeñas esculturas con las que trato de evocar la vida marina, a veces real y casi siempre imaginaria.
El resultado, piezas atemporales, al margen de la moda y para siempre. Para grandes ocasiones y para el día a día, tú decides cuando sentirte especial.
Cada pieza está completamente modelada a mano, son el resultado de un largo viaje de experimentación en el que llevo muchos años y que nunca termina. Muchas técnicas que unidas dan al acabado un carácter muy particular.
El intrincado trabajo da como resultado una extraordinaria ligereza que resalta su belleza y hace que todas ellas sean además muy cómodas de llevar.
El proceso creativo es tan orgánico como el efecto final. Comienzo sin bocetos, solo una idea en mi cabeza con la que empezar a modelar y las formas me van guiando. A veces el desenlace se asemeja a la primera intención y otras parece que han cobrado vida propia. Es por ello que salvo en artículos sencillos o más minimalistas, todos son únicos y diferentes.


CONSEJOS DE MANTENIMIENTO
La cerámica es un componente que se usa en joyería desde la antigüedad. Pero quizás por su origen humilde, como barro, no es hasta los últimos años que está tomando el estatus de material noble como le corresponde.
Por lo que respecta a mi trabajo, todas las piezas están diseñadas para resultar ligeras y resistentes. Es un material casi inalterable que lucirá igual toda la vida. Naturalmente, se puede mojar y en caso de ser necesario se puede limpiar con jabones comunes y domésticos para tal fin.
Durante su uso, no precisa de ninguna atención más allá de la de los complementos de cualquier otro tipo. Pero hay que tener cuidado durante el momento de ponerlos o quitarlos para evitar caídas. Procurar hacerlo de forma tranquila y segura.
Al momento de guardarlos, procurar no mezclarlos con piezas en cajones o joyeros donde puedan sufrir el roce con otros objetos, algunos elementos presentan terminaciones muy finas o puntiagudas que se pueden desportillar. Lo ideal es que los guardes en su cajita envueltos en su papel, tela o similar.
Como ves es muy sencillo, solo un poco de cuidado y estarán perfectas para siempre.